
En el mar no hay más que una extensión aparentemente infinita de agua, y por ello, para posicionarnos, tanto con GPS como con el sextante, solo podemos usar como referencia la carta náutica, que es un mapa de tipo mercatoriano cuyos elementos representados vienen referenciados en coordenadas de Latitud y Longitud expresadas en grados, minutos y décimas de minutos.
